Introducción
Los primeros años de vida de todo ser humano vienen llenos de cambios que se dan rápidamente. Bien sabemos que el cerebro desarrolla un alto porcentaje de su capacidad durante los primeros 5 años de vida. Este proceso de cambio y maduración comienza desde la gestación y se extiende por el resto de nuestras vidas, no paramos de evolucionar, en nuestras primeras etapas desarrollamos y maduramos muchas funciones. Hoy hablaremos de aquellas que necesitamos para logRar la regulación emocional.
El desarrollo emocional, al igual que el resto del desarrollo humano se da en etapas y es interdependiente con otras áreas del desarrollo humano. Todo está conectado, así que es importante entender el rol de la regulación neuro-sensorial en el desarrollo de la regulación emocional.
Regulación Neuro-Sensorial
Empecemos por centrarnos en los cambios sensoriomotores y como éstos están conectados con la percepción del mundo exterior. Nuestros sentidos son puertas a ese mundo y desde la gestación se van dando etapas de maduración progresiva que van permitiendo no solamente que esas puertas se abran al mundo exterior, sino que también permiten conectarnos, vincularnos y establecer relaciones.
Muchas veces esperamos que nuestros hijos/as pequeños/as sean capaces de autorregular sus emociones, a veces pensamos que nacen con esto ya desarrollado y les exigimos autocontrol. Entonces, lo primero es aprender que ningún ser humano nace autorregulado, éste es un proceso gradual que requiere experimentar el mundo a través de nuestros sentidos, como hablamos anteriormente y al principio requiere mucha ayuda externa para lograr la regulación. Eso quiere decir, que los bebés y niños pequeños necesitan de nosotros, adultos para regularse sensorial y emocionalmente. Paulatinamente su sistema neurológico va alcanzando la madurez para pasar a la co-regulación, aquella etapa en la que con un poco menos de apoyo, logran regularse. En algún momento de su desarrollo, alcanzarán una etapa en la que en la mayoría de las oportunidades lograrán la autorregulación por sí mismos. Personalmente creo que no importa la etapa en la que nos encontremos, habrán momentos en los cuales necesitemos ayuda externa, aunque a medida que crecemos y dependiendo de cómo se haya dado ese desarrollo, vayamos logrando la independencia al respecto.
Los adultos criando bebés y niñas/os pequeñas/os muchas veces esperamos de ellos respuestas emocionales muy maduras para su edad y etapa neurológica, pero la verdad es que atravesamos por este proceso de aprender a autorregular nuestras emociones paso a paso, y no solamente envuelve el que haya maduración cognitiva que nos ayude a valorar y reflexionar sobre nuestra conducta, sino, y muy importante, maduración neuro-sensorial.
Así que el primer paso, es ese, aprender a regular las experiencias neuro-sensoriales, esas que experimentamos a través de nuestros sentidos. Esto requiere tener un ambiente rico en experiencias y estimulación. Requiere que los tiempos y respuestas del bebé sean respetados, por tanto, es importante que los adultos cuidadores sepan observar y entrar en sintonía con el bebé.
Para que un adulto entre en sintonía con el bebé, podemos usar algunos conceptos del mindfulness como:
· Estar aquí y ahora. Conéctate con tu bebé en este momento, busca eliminar pensamientos que te saquen del momento como por ejemplo, se me olvidó comprar la leche, estoy preocupada porque no durmió bien anoche, etc. Sólo experimenta vive en la emoción y sensación del compartir con tu bebé, obsérvalo, acarícialo, bésalo, huélelo, siéntelo.
· Deja que fluya el momento, libérate, no hay que controlarlo todo, déjate ir en esa conexión especial de esta experiencia con tu bebé.
· Siente gratitud por la oportunidad de estar 100% en conexión con tu bebé en este momento.
La estimulación neuro sensorial rica, no requiere de mayores acciones de nuestra parte, el exponerlos a un mundo rico en variedad de experiencias de sonido, movimiento, contacto físico, aromas, temperaturas, estímulos visuales, y mucho amor, les da lo que necesitan para crecer y madurar neuro-sensorialmente. Entonces trata de incluir en su día oportunidades de:
· Contacto físico piel a piel, caricias, masaje y apapachos.
· Música variada, voces humanas, háblale con amor y cariño, cántale.
· Estimulación visual variada, no solamente tarjetas sofisticadas, más importante que vea tu rostro sonriente,vea otros rostros, vea la naturaleza y los colores.
· Salgan a caminar, visiten espacios abiertos adecuados según su edad, cuando ya lo consideres adecuado, permite visitas de familiares y de ahí en adelante trata de darle un ambiente rico en interacciones con otras personas.
· Exprésale tu amor sin límites, eso no lo malcría, por el contrario, le ayuda a crecer sintiéndose amado/a, valorada/o y más seguro/a.
Darles todo esto, además de respuestas emocionales reguladas y adaptativas por parte del cuidador, se convierte en un agente protector eficaz, sin embargo hay personas cuyos sistemas sensoriales son o más o menos sensibles, lo cual los ubica en un riesgo mayor de tener retrasos en su desarrollo neuro-sensorial, que puede llevar a retrasos a nivel socio-emocional, cognitivo y/o motor. En un próximo blog trataremos este tema.
A medida que nuestros niños/as van creciendo y pasando etapas de este desarrollo neuro-sensorial, van simultáneamente alcanzando etapas de regulación socio-emocional, que además están impactadas por ciertas hormonas que intervienen en este proceso de maduración y desarrollo. Todo está interconectado.
Regulación Emocional
Gracias a los avances en las investigaciones neurológicas, hoy día sabemos el rol que juegan ciertas estructuras cerebrales, hormonas y nuestra historia evolutiva sobre las emociones.
Evolutivamente hablando hemos desarrollado respuestas emocionales de protección frente al peligro que automáticamente se activan en situaciones que percibimos como un riesgo físico o emocional. Estas respuestas automáticas hacen que ciertas estructuras en nuestro cerebro produzcan ciertas hormonas que nos preparan para pelear, huir o congelarnos en una situación que percibimos como peligrosa. Es nuestro mecanismo automático de defensa. Del otro lado, cuando tenemos experiencias positivas, ciertas estructuras cerebrales producen las hormonas conocidas como del bienestar, que nos hacen sentir, como su nombre lo indica, bien, relajados, felices, en calma.
El como hayan sido nuestros primeros años de vida, es decir como hayan sido los patrones de crianza usados con nosotros, las respuestas y cuidado emocional de nuestros cuidadores primarios, hacen que predominen respuestas emocionales específicas, ya sea proactivas y eficaces o negativas y menos eficaces. Esto quiere decir que si vivimos una infancia traumática, hay mayores probabilidades de desarrollar respuestas emocionales de autoprotección que se activan intensamente en situaciones que percibimos peligrosas o que nos causan estrés, llevándonos a respuestas emocionales igualmente intensas.
Entonces, como cuidadores qué podemos hacer para prevenir en nuestros hijos respuestas emocionales intensas, que los pueden poner en mayor riesgo o poner a otras personas en riesgo?
1. Conócete. ¿Cómo respondes a las situaciones difíciles y crisis de la vida? ¿Cómo es tu actitud hacia el comportamiento de tus hijos? Si te pones en sus zapatos, ¿qué crees que ellos ven en ti cuando te enojas?
2. Inicia un cambio.Con más conciencia de tus respuestas emocionales, reflexiona sobre lo que puedes ir cambiando. Poco a poco y en pasos pequeños empieza un proceso,imagina una escalera, un paso a la vez para llegar a la meta que te traces.
3. Evita aquello que te lleve a volver a patrones anteriores. Hay situaciones inevitables, pero muchas más que podemos prevenir como, por ejemplo, consumo de alcohol, drogas, relaciones tóxicas, pensamientos negativos.
4. Trae a tu vida ambientes positivos. Vive una vida que te ayude a sentir paz interior, a sentirte en armonía y fortalecido/a. Esto lo puedes lograr incluyendo hábitos como el ejercicio, la alimentación saludable, rodeándote de ambientes sociales positivos y constructivos, buscando espacios para la meditación, dándole prioridad a tu vida familiar, gozando y disfrutando el momento en familia, con tus hijos.
Como te das cuenta, estos tips iniciales no hablan de lo que tienes que hacer con tus hijos sino CONTIGO primero. Nuestra primera tarea es sanar nosotros mismos para poder manejar eficiente y positivamente nuestro rol como cuidadores, conscientes del impacto tan grande que tenemos sobre nuestros hijos/as. Ser padre/madre es una inmensa responsabilidad y por naturaleza, todos queremos hacerlo bien porque queremos darles a nuestros hijos lo mejor. Sin embargo, muchos hemos pasado por experiencias tempranas traumáticas o dolorosas que no nos han equipado con herramientas funcionales para la crianza positiva, entonces tenemos que desarrollar esas destrezas.
Ahora que te has conocido mejor, y estás trabajando en tus propias respuestas emocionales, veamos que más podemos hacer por nuestros/as hijos/as.
1. Aprende sobre Desarrollo Infantil. Esto te prepara a responder pues entiendes lo que está pasando en ellos y sabes para lo que pueden estar listos/as o no.
2. Mantén la calma, si tu estás nervioso/a, ellos/as también, igual si estás enojada/o, molesto/a,triste, etc, estás generando alguna emoción negativa en ellos también.
3. Entiende la situación. ¿Qué pasó? ¿Qué generó su respuesta o actitud?
4. Se empático, es decir ponte en sus zapatos. Soy una niña/o de tantos años, que acaba de vivir esta experiencia y mi temperamento es, por tanto, mi respuesta a esta situación es….
5. Responde de acuerdo con su edad, etapa de desarrollo emocional, destrezas de auto regulación.
Aquí te comparto esta tabla que ilustra como la ciencia más reciente ve las etapas de regulación emocional en los niños/as pequeños/as. Esta información te indica lo que está pasando en la mayoría de los casos a nivel de desarrollo de la regulación emocional y puede ser una guía para decidir como apoyarles.
Esta tabla fue publicada en la revista Médica Clínica Las Condes como parte del artículo científico Desarrollo Socioemocional Temprano y Regulación Emocional. Olhaberry, M; Sieverson, C. (2022).
Tabla 1.Desarrollo socioemocional a lo largo del ciclo vital e interacciones tempranas [REV.MED. CLIN. CONDES -2022; 33(4) 358-366]
1. 0 a 7 m
· Sintonía con las reacciones faciales, físicas y vocales de los cuidadores, desregulación frente a respuestas inapropiadas
o 1 a 3 meses: sonrisa social
o 7 meses: mayor desarrollo de la memoria
2. 8-10 m
· 9 meses: mayor atención a) quienes lo rodean, b) logra atención conjunta y uso de los otros como referencia social.
3. 12-24 m
· 12 meses: mayor desarrollo del lenguaje gestual, verbal y motor favorece la regulación.
. 15 a 18 meses, se evidencia un patrón de apego con cada cuidador primario
. 18 meses: reconocimiento en un espejo, juegos de roles sencillos
4. 24- 36 m
· Mayor capacidad de atención, de postergar la gratificación y seguir instrucciones.
. 2 a 3 años: capacidad de simulación, que facilita la regulación emocional y potencia funciones cognitivas superiores
5. 36-60 m
. 3 a 4 años: disminuye el egocentrismo
. 4 a 5 años: desarrollan la “teoría de la mente” Mayor capacidad de planificar y anticipar consecuencias, mayor control inhibitorio y habilidades representacionales
Como se dan cuenta, al principio la regulación emocional no depende 100% de ellos. Ellos se regulan de acuerdo con las respuestas emocionales de los adultos a su alrededor, especialmente sus cuidadores principales de quienes esperan seguridad. Estas respuestas del adulto, se expresan con el lenguaje no verbal, como las expresiones faciales y posición corporal, el tono de voz, el nivel de sintonía/antinomia de la respuesta, y el tipo de vínculo afectivo que se ha desarrollado con el hijo/a.
Si su ambiente emocional les brinda seguridady confianza, ellos desarrollan destrezas de regulación emocional adaptativas, pues si en la crianza se desarrolla un vínculo seguro, los niños/as desarrollan confianza de que serán acogidos en momentos de estrés y desregulación, lo que les ayuda a responder adaptativamente en momentos difíciles y crisis. (Olhaberryy col, 2022). Si por el contrario, el ambiente emocional en el que están creciendo, se caracteriza por el abuso, la violencia y/o el maltrato, la respuesta de estrés que se activa en el cuerpo inunda al cerebro con las hormonas que le preparan para la defensa y cuando esto es recurrente, sencillamente el cerebro aprende a estar en modo alerta permanentemente lo que lleva a que el niño/a pueda desarrollar respuestas de regulación emocional desadaptativas, que a la larga lleva a este niño/a a desarrollar respuestas socio emocionales adversas en sus futuras relaciones interpersonales. (Olhaberry y col, 2022).
Espero que este artículo les brinde información y apoyo sobre la regulación emocional no solamente de nuestros hijos e hijas sino de nosotros mismos.
** Agradecimientos a PEXELS por las fotos que usamos en este artículo.
Les invito a que me dejen sus comentarios en CONTÁCTANOS.
Referencias
Olhaberrya,b. M , Sieverson, C. 2022.Desarrollo socio-emocional temprano y regulación emocional. REVISTA MÉDICACLÍNICA LAS CONDES. https://www.journals.elsevier.com/revista-medica-clinica-las-condes.REV. MED. CLIN. CONDES - 2022; 33(4) 358-366.